Tema 1. Atención a la infancia

La atención a la infancia se puede definir como el derecho que garantiza el desarrollo integral del individuo y de su personalidad desde los primeros años de vida, por tanto, son todos aquellos servicios, programas o iniciativas que satisfacen una o varias necesidades del niño. Es un concepto reciente, pues, hasta el siglo XIX se creía que los niños tenían prácticamente las mismas necesidades que los adultos y no precisaban de un tratamiento especial. La atención a la infancia se realiza mediante la intervención educativa.

Los cambios sociales, políticos y económicos que suceden a partir de la década de 1960 amplían el concepto de proceso educativo y hoy se habla de:

• Educación formal o reglada. Regulada por leyes y organizada por el gobierno en niveles educativos que se imparten en un espacio y tiempo determinados. Se reconoce mediante titulación oficial. Ejemplos: Educación Primaria, Bachillerato o Grado en Educación Primaria.
• Educación no formal. Programa educativo para la adquisición de aprendizajes no incluidos en el sistema educativo formal. Ejemplos: Certificado de manipulador de alimentos, Formador de Educación Vial o buceador profesional.
• Educación informal. Son los conocimientos, habilidades, actitudes, etc. que se adquieren al interactuar con los demás y mediante las experiencias que se viven en sociedad. Ejemplos: jugar en el campo con los primos y hermanos o ver una película.

Tanto la educación formal como la no formal tienen una finalidad pedagógica, de ahí que la intervención educativa se produzca mediante instituciones formales y no formales.

Los factores más importantes que han influido en la modificación del panorama educativo infantil son los cambios en la estructura de la familia, la incorporación de la mujer al mercado laboral y el desarrollo del estado de bienestar.

 

PUNTO 1. CONTEXTO DE LA INTERVENCIÓN EDUCATIVA

La intervención educativa es el conjunto de acciones que los diferentes agentes de socialización dirigen hacia los niños, de forma intencionada o no, a fin de que reciban una educación integral.

La socialización es el proceso por el que el individuo, en su interacción con otros, aprende a vivir eficazmente en sociedad. Los agentes de socialización son las instituciones y personas que favorecen y guían el proceso de integración y desarrollo social del individuo, principalmente: la familia, la escuela, el grupo de iguales y los medios de comunicación. 

En la intervención educativa influyen todos los factores que participan en la educación del niño como las instituciones formales y no formales, la legislación europea, estatal y autonómica vigente, los educadores (auxiliar de guardería, maestros), la familia, las TIC, etc.

El auxiliar de guardería debe ser consciente de que conocer y analizar el contexto de la intervención educativa contribuye al éxito de la atención a la infancia, ya que la intervención, sea formal, no formal o informal, se puede realizar en cualquiera de estos ámbitos.

 

 

PUNTO 2. LAS INSTITUCIONES FORMALES Y NO FORMALES DE ATENCIÓN A LA INFANCIA

Las instituciones de atención a la infancia son organizaciones fundadas para realizar actividades o prestar servicios de intervención educativa.

En España son varias las administraciones competentes en la atención a la infancia:

• Administraciones estatales.

– El Ministerio de Educación, que establece los contenidos mínimos curriculares, los requisitos de los centros educativos y las titulaciones de los profesionales de la educación.

– El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, tiene dos clases de competencias: la prevención de enfermedades y de posibles carencias (en los centros de salud y hospitales); y la protección al menor y a las familias.

• Administraciones autonómicas. Aprueban la legislación específica en materia de atención a la infancia en varios ámbitos como el educativo, protección del menor, sanitario, etc.
• Administraciones locales. Los ayuntamientos, como instituciones más cercanas al ciudadano, asumen una responsabilidad inmediata y ofrecen acciones preventivas.

 

2.1. Tipos de instituciones

Existen dos tipos de instituciones de atención a la infancia:

• Instituciones formales. Con una misión educativa, implican un currículo adecuado a la edad de los niños y, de manera directa y perseverante, al educador. Ejemplos: centros escolares públicos, centros escolares privados y centros concertados. Califican de esenciales en sus planteamientos tanto la participación de las familias, como el papel de los educadores en el proceso de intervención. Son centros públicos los que se sostienen con fondos provenientes de una administración y, por tanto, su titular es una administración pública. Los centros privados tienen como titular a una persona física o jurídica. Los centros educativos concertados son escuelas privadas que reciben financiación pública.
• Instituciones no formales. Ofrecen alternativas educativas en diferentes contextos. Su objetivo es promover la mejora y el desarrollo de las potencialidades del niño, para lo que oferta diferentes servicios, programas y formatos. Se trata de un modelo formativo no escolarizado y que se presenta como una alternativa no convencional y, con frecuencia, complementaria. El currículo deja de ser obligatorio, restando protagonismo al educador. Ejemplos: granja escuela, parque de ocio, asociaciones, etc.

 

2.2. Modelos

A lo largo del tiempo, los centros de educación formal han recibido varios nombres: guarderías, jardín de infancia y, ahora, centros de Educación Infantil. Igual sucede con los requisitos de formación y titulación de los profesionales del campo de la educación, así como con los requerimientos mínimos de espacios, instalaciones, normativa, etc.

Esto es porque la normativa responde a dos posibles modelos: uno en el cual predomina la carga educativa y otro que se centra en la carga asistencial. En función de la preferencia por uno de estos dos modelos, los requisitos exigibles a centros y profesionales varían.

 

2.3. Características y funciones de las instituciones formales: la escuela infantil

La escuela infantil se caracteriza por ser una institución formal en la que intervienen varios profesionales de la educación y que cuenta con un espacio físico, un clima afectivo y una organización diseñada para permitir la formación global de los niños de entre 3-4 meses y 6 años.

Su principal función es organizar los elementos que interactúan en la educación para favorecer el desarrollo integral del niño, en colaboración con los padres ylos tutores. Imparte la primera etapa del sistema educativo español, de carácter voluntario.

Asimismo, tiene la función de integrar a niños con necesidades educativas especiales mediante apoyo psicopedagógico y en el marco curricular propio de la Ley de educación.

La escuela infantil se organiza mediante una planificación educativa que incluye las actividades escolares y las rutinas propias de la atención a las necesidades básicas de alimentación, descanso, higiene y juego.

Las escuelas infantiles son centros privados, centros concertados y centros públicos, dependientes del Ministerio de Educación (Ceuta y Melilla), de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos. Los centros públicos pueden estar gestionados directamente por la administración y se entra a trabajar en ellos mediante oposición; o bien, por gestión indirecta: el ayuntamiento o la comunidad convoca un concurso al que concurren empresas privadas para quedarse con la gestión del centro

Las escuelas infantiles son el modelo de atención a la infancia más importante, es el más extendido, el más demandado y el más regulado. Supera conceptos como el de guardería, lugar donde atender y cuidar al niño mientras no estaba con su familia, y el de preescolar, espacio donde preparar al niño para su acceso a la formación obligatoria.

 

Objetivos

Los objetivos de las escuelas infantiles quedan establecidos por la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa (LOMCE) que mantiene lo aprobado por la Ley Orgánica de Educación (LOE) en 2006, en sus artículos 12 a 15. Atendiendo a dicha normativa, las instituciones educativas formales buscan:

• Contribuir y favorecer el desarrollo físico afectivo, social e intelectual de los niños.
• Compartir la educación de la familia.
• Compensar desigualdades y carencias del entorno del niño.
• Generar relaciones sociales y el encuentro con el grupo de iguales y con otros adultos.
• Contribuir a la adquisición de hábitos de autonomía, salud y convivencia en un entorno educativo rico.

 

Organización y funcionamiento

Las escuelas infantiles tienen autonomía organizativa y pedagógica para responder con mayor eficacia a las necesidades de los niños que atiende y a sus contextos sociales.

Se denominan así genéricamente y las privadas, además, incluyen este calificativo. El nombre del centro se completa con una denominación específica y que es con la se inscriben en el Registro de Centros Docentes. Ejemplos: Escuela Infantil Gloria Fuertes (centro público), Escuela Infantil Privada Los Pitufos.

En cuanto a la organización temporal, el curso tiene una duración máxima de 11 meses al año y el horario debe ser lo suficientemente flexible para garantizar la función educativa del ciclo y atender las necesidades de los niños y sus familias. No es recomendable que el niño permanezca más de 8 horas diarias en la escuela infantil. Cada curso, las administraciones competentes establecen las normas necesarias para la confección de horarios y del calendario.

Las administraciones de cada comunidad autónoma con competencias en Educación establecen los contenidos educativos y los requisitos mínimos en las instalaciones, la ratio (cantidad máxima de alumnos por personal docente que puede haber en cada grupo) y el número de puestos escolares, por eso, la relación numérica alumnos-profesores puede variar de una comunidad a otra. Sin embargo, las escuelas infantiles que tengan menos de 3 unidades pueden agrupar en las aulas a niños de diferentes edades sin superar una ratio de 15 alumnos por unidad.

El personal que compone el equipo educativo en las escuelas infantiles varía según se trate del primer o del segundo ciclo:

• 1º ciclo (0-3 años): Grado en Maestro de Educación Infantil o equivalente (Maestro de Educación Infantil, Profesor de EGB en Infantil, etc.), Técnico Superior en Educación Infantil o equivalente y profesionales habilitados por la Administración educativa.
• 2º ciclo (3-6 años): Grado en Maestro de Educación Infantil o equivalente.

 

2.4. Las instituciones no formales

Son entidades que ofrecen servicios, programas y experiencias educativas enel marco del ocio y el tiempo libre y que responden, en diversos contextos, a necesidades de los niños de 0 a 6 años y/o de sus familias.

Su organización y objetivos son diversos y vienen determinados por el fin que justifica la creación de la entidad: ludotecas, asociaciones infantiles, casas de acogida, centros de ocio.

Destacan por su relevante función social:

• Las residencias infantiles. Su misión es ofrecer a los niños en situación de desamparo o que deben ser separados de su familias un servicio que les garantice la atención adecuada hasta que se restablezca su vida familiar. Ejemplos: centros de acogida para menores, residencias, pisos y hogares, centros de primera infancia, comunidades infantiles.
• Ludotecas. Son centros que ofertan al niño actividades lúdicas en su tiempo libre. Cubren una franja de edad que rebasa los 6 años y a veces organizan actividades para toda la familia. Su función educativa se cumple porque al utilizar el juego en grupo como herramienta principal, favorece el desarrollo psicomotor, mental, afectivo y social del niño.
• Granjas escuelas. Entidades cuyo objetivo es acercar al medio natural al niño del entorno urbano. Para ello, desarrollan programas de actividades que abarcan uno o varios días en un espacio natural donde el niño conoce animales, plantas y las tareas habituales para el mantenimiento de una granja.

 

– Otros servicios y programas.

– Apoyo educativo en el ámbito rural, dirigido a una población aislada geográfica y socialmente. Ejemplos: Preescolar na casa (Galicia), Programa de apoyo educativo (Mallorca), el Preescolar itinerante (Asturias) o la Casa de niños (Madrid), no exclusivo del entorno rural.

– Colonias o campamentos de verano.

• Aulas hospitalarias, que atienden a niños hospitalizados de media y larga duración.
• ONG dedicadas a la infancia como Infania, Prodeni, Scouts de España, Save the children, etc.

Los profesionales que trabajan en la modalidad no formal son Técnicos Superiores de Educación Infantil, Auxiliares de Guardería, Técnicos Superiores en Animación Sociocultural, Técnicos Superiores en Integración Social y Animadores Sociales.

El servicio de atención temprana son los servicios encargados de detectar de manera precoz posibles trastornos que el niño pudiera sufrir en su desarrollo madurativo

El servicio de apoyo educativo domiciliario atiende a niños enfermos que no pueden ir a la escuela infantil, permitiendo la continuidad del proceso educativo de los niños y facilitando la reincorporación posterior a su centro escolar. El servicio se desarrolla de manera personalizada en el domicilio del niño.

Un buen ejemplo de ello es La casa Ronald McDonald una institución no formal que pertenece a la fundación internacional del mismo nombre y su objetivo es dar cobijo y asistencia a niños (y a sus familias) que se trasladan desde su residencia habitual para ser hospitalizados o recibir tratamientos de larga duración.

 

PUNTO 3. LA LEGISLACIÓN EN MATERIA DE EDUCACIÓN INFANTIL

Una normativa específica protege y garantiza los derechos del niño y regula las obligaciones de los padres o tutores y de los poderes públicos, tanto a nivel europeo como estatal y autonómico.

Los derechos de todas las niñas y niños quedan recogidos en los 54 artículos de la Convención sobre los Derechos del Niño, cada vez más denominada Derechos de la Infancia. Junto a estos derechos, también existen los Deberes del Niño.

El primer documento que considera los derechos de los niños como una exigencia jurídica de carácter obligatorio es la Convención sobre los Derechos del Niño aprobada por la ONU en 1989. Es un tratado internacional de derechos humanos que aúna en un solo instrumento normas universales relativas a la infancia y que, según UNICEF, se fundamenta en cuatro principios esenciales:

• La no discriminación. Igualdad de derechos para todos los niños.
• El interés superior del niño. Ante cualquier decisión siempre se tendrá en cuenta qué es lo mejor para el niño.
• El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo.
• A la participación. El niño tiene derecho a ser consultado y a que se tenga en cuenta su opinión en situaciones que le afectan.

Concretamente, la Convención de los Derechos del Niño influye en la vida de estos de la siguiente manera:

• Entorno familiar. El artículo 19 establece la obligación de los Estados de proteger a los niños de todas las formas de malos tratos perpetrados por las madres, los padres o cualquier otra persona. En consecuencia, en España se modificó el Código Civil para que no tenga cabida la posibilidad de que las niñas y los niños puedan ser golpeados por sus padres.
• Entorno educativo. La Convención responsabiliza a los gobiernos de que se imparta educación obligatoria y gratuita a todos los niños, al menos en la enseñanza primaria. Por este motivo, en España la escolarización es obligatoria y gratuita desde los 3 años y hasta los 16
• Entorno social. Los gobiernos tienen la obligación de ayudar o poner los medios necesarios cuando las familias no tienen capacidad o recursos suficientes para cuidar y proteger a sus hijos. En España, La Ley de Protección Jurídica del Menor (1996) señala los procedimientos para que un niño sea adoptado o acogido, en una familia o institución, teniendo en cuenta siempre en primer lugar el interés del niño.

 

3.1. Atención a la infancia en Europa

Cambios en las familias (incorporación de la mujer al mercado laboral, otros modelos de familias diferentes al tradicional, globalidad de la economía) han llevado a los gobiernos a la aprobación de medidas para que las familias puedan atender a sus hijos, sobre todo, en las edades más tempranas:

• Permiso por maternidad. Posibilita que la madre pase un tiempo con su hijo después de dar a luz a fin de facilitar la lactancia, el descanso de la madre y su adaptación a la nueva situación familiar. También se concede en casos de adopción y es común en toda Europa, aunque con diferente duración.
• Permiso por paternidad. Permite al padre atender a su hijo en los primeros años de vida. Se da en Dinamarca, Finlandia, Suecia y España, donde dura 15 días.
• Permiso parental. Se concede una vez agotados los otros permisos. No suele estar remunerado y consiste en ampliar el tiempo de estancia con el recién nacido para ocuparse de él al menos 3 meses más.

En Europa, los menores de 6 años disfrutan de una amplia oferta educativa, sanitaria, social y cultural. Los centros de atención a estos menores se pueden clasificar en centros externos al hogar familiar y en otros hogares, atendidos por cuidadores. En toda Europa existe la figura de los abuelos como cuidadores, aunque con distinta incidencia dependiendo del país.

Un informe de 2011 publicado por la UE afirma que solo 8 países cumplen los “objetivos de Barcelona”, acordados en 2002 y que indican que deben existir servicios de atención a la infancia para el 90% de los niños de entre 3 años y la edad de escolarización obligatoria y para el 33% de los niños menores de 3 años. España cumple el segundo de ellos.

 

3.2. Legislación estatal y autonómica

A nivel estatal, la Constitución Española de 1978 hace referencia en varios artículos a la protección y derechos de los menores:

• Título I. Habla de los Derechos y Deberes Fundamentales, incluidos los de los niños.
• Artículo 27. Reconoce que todo el mundo tiene derecho a la educación y a la libertad de enseñanza. También, que el objeto de la educación es el desarrollo integral de la personalidad.
• Artículo 39. Señala que los poderes públicos garantizarán la protección social, económica y jurídica de las familias, la protección integral del niño y la asistencia a los padres en toda circunstancia.

Como consecuencia de lo recogido en la Constitución, los gobiernos han aprobado leyes que regulan diferentes aspectos que afectan a la infancia:

• La reforma del Código Civil mediante la Ley 21/1987, de 11 de noviembre, modificó en profundidad el derecho de familia. Por ejemplo, estableció que los derechos que deben preservarse como criterio a la hora de tomar decisiones son los de los hijos y no los de los padres biológicos u otros; o la regulación de las relaciones paterno-filiales, recogida en el Título VII del Libro I.
• La Ley Orgánica 1/1996 de 15 de enero, de protección jurídica del menor y de modificación parcial del Código Civil y de la Ley de Enjuiciamiento Civil significó la adaptación de la normativa vigente a los cambios sociales. Busca la reforma de las tradicionales instituciones de protección del menor y la implicación en la reforma de los poderes públicos, las instituciones relacionadas con menores, las familias y al ciudadano, en general.
• La Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE) y la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa (LOMCE) regulan y estructuran el sistema educativo.

La LOMCE no introduce modificaciones en la Educación Infantil y mantiene lo recogido en la LOE para esta etapa.

Por otra parte, excepto las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla, el resto de las comunidades autónomas tienen asumidas competencias en Educación que desarrollan mediante sus propias leyes, teniendo en cuenta el marco legislativo estatal.

 

 

 

 

PUNTO 4. EL EDUCADOR INFANTIL

Si la educación tiene como objetivo capacitar al niño para vivir en sociedad al permitirle asimilar las reglas de una comunidad, ejercitarlas y comprobar sus efectos; el papel del educador es guiar dicha socialización o intervención: enseñar y aprobar comportamientos y conductas, asegurar la estabilidad emocional del pequeño y orientar a las familias. Para ello, el educador debe poseer unas características personales y profesionales determinadas al acabar su formación.

El perfil del auxiliar de guardería, como educador infantil, se deriva del Real Decreto 1394/2007, de 29 de octubre, que establece en su artículo 4 que la competencia general del educador infantil consiste en “diseñar, implementar y evaluar proyectos y programas educativos de atención a la infancia en el primer ciclo de educación infantil en el ámbito formal, de acuerdo con la propuesta pedagógica elaborada por un maestro con la especialización en educación infantil o título de grado equivalente, y en toda la etapa en el ámbito no formal, generando entornos seguros y en colaboración con otros profesionales y con las familias”.

El mismo decreto (RD 1394/2007) determina también las competencias profesionales, personales y sociales del educador infantil, a saber:

• Programar la intervención educativa y de la atención social a la infancia a partir de las directrices del programa de la institución y de las características individuales, del grupo y del contexto.
• Organizar los recursos para el desarrollo de la actividad respondiendo a las necesidades y características de los niños y niñas.
• Desarrollar las actividades programadas, empleando los recursos y estrategias metodológicas apropiados y creando un clima de confianza.
• Diseñar y aplicar estrategias de actuación con las familias, en el marco de las finalidades y procedimientos de la institución, para mejorar el proceso de intervención.
• Dar respuesta a las necesidades de los niños y niñas, así como a la de las familias que requieran la participación de otros profesionales o servicios, utilizando los recursos y procedimientos apropiados.
• Actuar ante contingencias relativas a las personas, recursos o al medio, transmitiendo seguridad y confianza y aplicando, en su caso, los protocolos de actuación establecidos.
• Evaluar el proceso de intervención y los resultados obtenidos, elaborando y gestionando la documentación asociada al proceso y trasmitiendo la información con el fin de mejorar la calidad del servicio.
• Mantener actualizados los conocimientos científicos y técnicos relativos a su actividad profesional, utilizando los recursos existentes para el aprendizaje a lo largo de la vida.
• Actuar con autonomía e iniciativa en el diseño y realización de actividades, respetando las líneas pedagógicas y de actuación de la institución en la que desarrolla su actividad.
• Mantener relaciones fluidas con los niños y niñas y sus familias, miembros del grupo en el que se esté integrado y otros profesionales, mostrando habilidades sociales, capacidad de gestión de la diversidad cultural y aportando soluciones a conflictos que se presenten.
• Generar entornos seguros, respetando la normativa y protocolos de seguridad en la planificación y desarrollo de las actividades.
• Ejercer sus derechos y cumplir con las obligaciones que se derivan de las relaciones laborales, de acuerdo con lo establecido en la legislación vigente.
• Gestionar su carrera profesional, analizando oportunidades de empleo, autoempleo y aprendizaje.
• Crear y gestionar una pequeña empresa, realizando un estudio de viabilidad de productos, de planificación de la producción y de comercialización.
• Participar de forma activa en la vida económica, social y cultural, con una actitud crítica y de responsabilidad.

Al auxiliar de guardería se le puede definir como una persona: 

• Profesional con iniciativa, creatividad e imaginación.
• Alegre, empático, sensible, estable emocionalmente, con autoestima y autocontrol.
• Paciente, afectuoso, con capacidad física para estar con niños y una manera correcta de expresar la afectividad.
• Comunicativo, expresivo espontáneo y con facilidad para el trabajo en equipo.
• Responsable y con capacidad de improvisación.
• Con interés y motivación para desarrollar sus funciones y continuar su formación.

 

4.1. Código deontológico del educador infantil

El código deontológico es la ética o conjunto de normas y principios morales que regulan el ejercicio de una profesión. La ética del auxiliar de guardería está relacionada con los derechos humanos y los derechos del niño. El siguiente cuadro resume los valores del código deontológico del educador.

 

4.2. Funciones del educador

El auxiliar de guardería en el desempeño de su trabajo realiza funciones en relación con los niños, las familias, los demás educadores y con profesionales de otros ámbitos. La cooperación entre profesionales de varios ámbitos diferentes se denomina interdisciplinariedad.

 

Funciones en la intervención con los niños

El educador establece una relación muy sólida de afecto y confianza con el niño que es diferente a cualquiera de las relaciones que el niño mantiene con sus padres y con otros adultos. Además, del clima de afecto y seguridad, el auxiliar de guardería es un modelo a imitar.

Por tanto, las funciones del profesional en relación a los niños están dirigidas a conseguir ese clima de afecto, confianza, seguridad, de atención a sus necesidades básicas y a procurar la adquisición paulatina de habilidades que faciliten la autonomía del niño.

 

Funciones del auxiliar de guardería (intervención con los niños)

• La planificación y organización del ambiente que vive el niño, procurándole estímulos y experiencias que desarrollen sus capacidades.
• Atender las necesidades básicas del niño mediante una relación educativa, que facilite su autonomía personal y de afecto.
• Distribuir espacios y mobiliario de manera que faciliten las rutinas y momentos de la jornada escolar del niño.
• La selección de materiales, juegos, juguetes y actividades que permitan el aprendizaje de habilidades y técnicas (pintar, pegar, rasgar, cortar).
• La selección de materiales, juegos y actividades que favorezcan la curiosidad, la creatividad y el ingenio.
• Potenciar la comunicación, la expresión y la socialización mediante juegos, canciones, cuentos, etc.

 

Funciones en la intervención con las familias

La familia es el principal agente de socialización de un individuo y el máximo responsable de la educación del niño. Sin embargo, el profesional tiene un papel esencial en el desarrollo integral de la persona al diseñar y guiar la intervención educativa. Es obvio que tanto las familias y como los educadores deben remar en la misma dirección y de ahí nace la necesidad del profesional de establecer una relación fluida con las familias, basada en una comunicación permanente y honesta.

En este campo las funciones principales son:

• Conocer y comprender el entorno vital del niño solicitando a las familias información sobre su historia personal. Por ejemplo: si tiene más hermanos.
• Detectar necesidades concretas y determinar el nivel de desarrollo del niño. Por ejemplo: si gatea en torno a los 9 meses.
• Informar a las familias de los progresos del niño y del tipo y carácter de las relaciones que establece. Por ejemplo: si pide ayuda o si pega a otros niños.
• Compartir con las familias sus objetivos y cómo va a intervenir educativamente con el niño.
• Definir con la familia cómo va a ser la colaboración profesional – padres para conseguir los objetivos de la intervención.

 

Funciones en relación del equipo de educadores

El auxiliar de guardería no trabaja solo sino que forma parte de un equipo con el que colabora y del que recibe apoyo. El equipo de educadores tiene objetivos comunes, entre otros:

• Facilitar el intercambio de experiencia entre profesionales, enriqueciéndolos.
• Diseñar la propuesta de intervención, programarla y asignar el papel de cada miembro del equipo.
• Evaluar el proceso de enseñanza-aprendizaje y la intervención educativa.

Para que un equipo de educadores funcione, los profesionales deben tener determinadas capacidades.

 

Funciones en relación con otros profesionales

En la escuela infantil, el equipo educativo trabaja de manera coordinada con otros profesionales que también intervienen con los niños:

• Educadores y maestros especialistas. Por ejemplo, los centros que ofrecen clases de inglés o los maestros de música en el segundo ciclo de infantil.
• Educadores y maestros de apoyo. Atienden necesidades educativas específicas, como, por ejemplo, las deficiencias en el lenguaje.
• Equipos de atención temprana (EAT) y equipos de orientación educativa y psicopedagógica (EOEP). Los EAT detectan y previenen en edades tempranas necesidades educativas especiales. Los EOEP son un servicio externo a la escuela que ofrece orientación educativa y técnica a los educadores.

La relación del educador con otros profesionales requiere mucha comunicación y contempla tres momentos:

• Principio de curso. Momento para conocer a los niños, la problemática y los objetivos de la intervención.
• Durante el curso. Fase donde se analizan los progresos, las conductas, las actividades, etc.
• Final de curso. Cierre de etapa donde se recopila la información, para la evaluación final donde se valoran tanto los progresos del niño como el proceso de intervención promovido por los equipos de profesionales.

Los equipos de educadores trabajan con otros profesionales tanto en instituciones formales como en las no formales y tanto de forma puntual como continuada. Estos profesionales pueden colaborar de manera institucional (por ejemplo, un EOEP, un centro de formación de profesores o la ONCE) o personal (un psicólogo, un logopeda que colaboran de forma privada).

Los equipos específicos son un grupo de profesionales cualificados en una especialidad que desarrollan una labor concreta pero complementaria a la de otros equipos. Pueden colaborar en el centro de trabajo de un auxiliar de guardería además de los AET y los EOEP, por ejemplo, centros de formación de profesores, servicios de inspección técnica de educación, centros de mediación intercultural y familiar, centros sanitarios, de atención a la familia, de los servicios sociales, equipos de atención a deficiencias motoras, de atención a deficiencias visuales o al autismo, etc.

 

4.3. El trabajo en equipo

El profesional de la educación trabaja en equipo, lo que significa que un grupo de personas capacitadas para establecer unos objetivos comunes contribuyen de manera coordinada a la creación y desarrollo de un proyecto de intervención educativa. El equipo no surge, debe hacerse y posibilitar la integración de nuevos miembros.

La intervención educativa es un proceso complejo que necesita la concurrencia de varios profesionales que trabajen en equipo, no puede hacerlo un individuo. Esto significa que hay que compartir con los demás educadores la planificación, el diseño y la evaluación de la intervención a fin de lograr unos objetivos comunes.

Para que un equipo funcione con eficacia deben existir los siguientes elementos:

• Una persona que coordine o lidere el grupo.
• Una comunicación fluida entre los miembros.
• Complementación. Cada miembro tiene su papel en el equipo.
• Confianza. Es fundamental para que un equipo funcione y es la base de toda buena comunicación.
• Compromiso. Cada miembro se implica en la consecución del objetivo y se compromete a sumar esfuerzos.

 

Como se ha dicho, el equipo tiene que hacerse. Existen varias fases en la creación de un equipo, que según el libro de Bruce Tuckman Teoría de las cinco etapas del desarrollo grupal (1977) son:

• Formación. Momento inicial del equipo. Predomina la ilusión por el proyecto, el interés por conocerse y las relaciones son agradables, aunque existen duda y no se sabe cómo actuar.
• Tormenta. Aunque los miembros aceptan el grupo, aparecen las diferencias de carácter y personalidad y con ello, roces y tensiones. Se compite por las ideas y por ser tenidos en cuenta.
• Normatividad. Se ha establecido una jerarquía que reconoce el liderato del coordinador del equipo y los roles de cada miembro. Es la etapa de la organización y la cooperación. El grupo entiende que, a pesar de las diferencias, debe avanzar para conseguir el objetivo común y superar así los enfrentamientos personales. Algunos roles contribuyen a facilitar el logro del objetivo, sin embargo otros perjudican la labor del equipo.
• Ejecución. Es la fase de consolidación del equipo. Ha aprendido a trabajar juntos y es el momento más productivo del grupo.
• Separación. La última etapa es la de dispersión del equipo cuando se consigue el objetivo o se acaba el proyecto de intervención. Esta fase produce euforia por los logros y/o tristeza e incomodidad por la desaparición de las relaciones personales.

El buen funcionamiento de un equipo depende sobre todo de la fluidez de la comunicación, del clima de trabajo y de que se dé una actitud positiva ante los errores individuales.

 

El equipo educativo

Compuesto por todos los educadores de un centro o de un programa de atención al niño, para coordinar la labor de cada educador en pro del éxito del proyecto de intervención educativa.

Como en otros grupos, el trabajo del equipo será efectivo si:

• Está bien organizado y el trabajo se divide en fases:

– Análisis de la realidad o situación de partida.

– Toma de decisiones y planificación previa del trabajo.

– Puesta en práctica ordenada, secuenciada.

– Evaluación.

• Se determinan las necesidades del equipo y de cada miembro, tanto en el aspecto personal y de las relaciones (condiciones de trabajo, predisposición, ideario del centro, conocimiento del resto del equipo), como en el organizativo (horarios y lugar de reuniones, material de apoyo).
• Se garantiza que todo el equipo conoce y asume los objetivos.
• Se especifica una línea concreta de trabajo y se plasman por escrito las decisiones finales que se adopten.
• Se aseguran y mantienen las relaciones fluidas entre los miembros del equipo. Es esencialmente importante para la eficacia del trabajo.
• Todos los miembros participan, opinan y deciden. Se analizan y debaten todos los puntos de vista.
• El trabajo se divide en pequeñas tareas fáciles de hacer, de evaluar y de repartir para que cada persona asuma la labor que realmente puede realizar.

 

El coordinador de equipos

El equipo precisa de un coordinador que dirija al grupo y guíe el trabajo.

En las escuelas existen las figuras del coordinador de ciclo y el coordinador de etapa, ambos bajo la supervisión y coordinación del director de centro.

 

La resolución de conflictos

El conflicto forma parte de la vida del equipo y por eso no se deben evitar ni ignorar. Un conflicto bien gestionado refuerza el equipo y la autoestima de sus miembros. Existen técnicas para la resolución de conflictos que el educador debe dominar.

Para solucionar un conflicto se pueden seguir estas pautas de actuación:

• Lo primero será detectarlo y tener la voluntad de solucionarlo.
• Definir el problema.
• Analizar sus causas.
• Plasmar por escrito los objetivos acordados para resolver el conflicto. Cabe recordar que los objetivos deben ser claros y realistas.
• Proponer alternativas y posibles soluciones.
• Elegir la mejor solución.
• Cuando se afronta un conflicto se puede hacer por:

– Confrontación.

– Negociación.

 

Técnicas útiles en la resolución de conflictos son:

• La escucha activa.
• Preguntar adecuadamente para pedir información que aclaren posturas, opiniones, intereses; para desbloquear la situación o la conversación.
• Realizar concesiones, a lo mejor no previstas a priori, para no obstaculizar la negociación. En toda negociación las partes deben ceder algo.
• Proponer medidas condicionadas a que la otra persona realice cambios.
• Buscar soluciones planteando sugerencias.
• Aplazar la reunión si la situación o el cansancio lo requieren.
• Resolver el conflicto antes de volver a convocar una reunión de todo el equipo.

 

PUNTO 5. LAS TIC: FUENTES DE INFORMACIÓN

En la era de la comunicación, la revolución tecnológica ha introducido modificaciones en la manera de trabajar, de relacionarse con las personas y de aprender y cada vez son más los centros educativos que introducen en sus aulas ordenadores, pizarras digitales, cámaras fotográfi cas digitales, videocámaras, etc.

La incursión de las nuevas tecnologías en el colegio debe ir acompañada de un aprendizaje previo por parte de los profesores, para utilizarlas debidamente y estructurar las clases en torno a su uso, y así sacar el máximo partido y complementar debidamente la información que se enseña. Por ello es muy importante comprender que este tipo de aprendizaje debe ser algo complementario al aprendizaje clásico.

 

5.1. Ventajas

Las aulas TIC presentan muchas ventajas para el aprendizaje, entre las que podemos encontrar las siguientes:

• Los alumnos muestran más interés y se ven más motivados a la hora de aprender.
• Los alumnos están más implicadosal interactuar con los ordenadores.
• Se enseña a trabajar de manera autónoma y de manera metódica.
• Gracias a las correcciones momentáneas, se puede aprender a partir de los errores cometidos.
• Aumenta significativamente la comunicación entre alumnos y profesores.
• Gracias a las TIC se promueve también el trabajo en grupo y propicia las relaciones sociales entre los alumnos.
• Facilitan el pensamiento crítico frente a las informaciones obtenidas por otros medios tecnológicos.
• Desarrolla enormemente las habilidades de búsqueda y selección de información.
• Enseña la alfabetización informática y audiovisual desde pequeños.
• Mejora significativa de la expresión y creatividad.

 

5.2. Inconvenientes

A pesar de todo lo que se ha expuesto, las TIC pueden ocasionar algunos proble,as que generalmente son debidos a su mal uso.

• A veces hace que el alumno se distraiga con los ordenadores y pierdan el tiempo en las aulas.
• Si no se complementa con otros métidos, el aprendizaje no llega a ser completo.
• La visión que tiene el alumno de la realidad puede llegar a ser simplemente parcial.
• La interacción con los ordenadores pueden llegar a causar ansiedad en los alumnos.
• Los alumnos pueden desarrollar dependencia a las tecnologías.